Hoy está previsto que el cuerpo sin vida del papa Juan Pablo II  descienda las “escaleras de los muertos” del Palacio Pontificio para ir a la basílica de San Pedro, donde el público podrá rendir su homenaje, mientras se preparan los funerales a los que se estima asistirán más de dos millones de peregrinos.

Los preparativos del sepelio del Papa serán el punto álgido de una semana cargada en el Vaticano, donde el camarlengo Eduardo Martínez Somalo administra los asuntos hasta la elección del nuevo Papa.

Ayer el jefe del gobierno, Silvio Berlusconi, convocó un Consejo de Ministros para tomar una serie de disposiciones concernientes a la organización de los funerales del que fuera jefe de la Iglesia Católica durante  casi 27 años, a los que asistirán jefes de Estado y de Gobierno de todo el  mundo.

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La Santa Sede ha informado que el funeral solemne se celebrará no antes del jueves próximo en la Basílica de San Pedro y estará precedido de tres días de exposición del cuerpo del Papa para que reciba el homenaje de los fieles.

Hasta ayer se desconocía el lugar donde será enterrado el Santo Padre.

Los cardenales abrirán hoy, en la Congregación general de Cardenales que se reunirá por primera vez, el testamento de Juan Pablo II, en el que se espera diga dónde quiso ser enterrado, si en el Vaticano o en la catedral de Cracovia, en su Polonia natal.

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Todo hace pensar que el Pontífice será enterrado, como la mayor parte de los papas, en las grutas de la basílica de San Pedro, a pocos metros donde está la tumba del Apóstol Pedro.

En la reunión se establecerá el calendario preciso de todos los acontecimientos que se desarrollarán hasta el final de este  periodo de nueve días, incluida la fecha del entierro.
Este debe producirse  entre el cuarto y el sexto día a partir de la muerte.

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Fuentes del Vaticano informaron que por la masiva llegada de fieles, los funerales del Papa no se celebrarán antes del viernes 8 de abril y no se descarta que puedan aplazarse al sábado, con el objetivo de permitir a los miles de fieles de todo el mundo rendirle homenaje.