La alcaldesa de Mocache, María Cristina de Andrade, dijo ayer que el crimen del vicealcalde Bolívar Cordero y su hijo Yogar Cordero Molina, puede deberse a retaliaciones políticas. Al respecto, la Policía de Los Ríos no dio ninguna versión.

La Alcaldesa recordó que en enero pasado, antes de su posesión, recibieron pasquines en el que se los amenazaba de muerte. “La gente sabe quiénes son”, sostuvo, al evitar dar nombres de los posibles autores de las amenazas en contra de ella y de Cordero.

La autoridad municipal lamentó ambos crímenes y señaló que a pesar de que Mocache es un cantón con 40 mil habitantes solo tienen a doce policías para velar por su seguridad.