Los padres de Jorge Washington Meza Eugenio, de 35 años, quien falleció el pasado lunes en un accidente de tránsito en Toledo (España), empezaron ayer las gestiones en la Defensoría del Pueblo para lograr la repatriación de su cadáver.

En la sala del mezzanine, en un edificio de construcción mixta, Graciela Eugenio y Washington Meza estaban atentos al teléfono, pues esperaban una llamada desde España para saber si se hicieron o no los trámites para el retiro de los restos de su hijo del sanatorio Torrijo.

“Yo lo que quiero es que me devuelvan el cuerpo de mi hijo lo más pronto posible. Él viajó a España hace dos años con el afán de ganar dinero para comprar una casa”, relató la madre de Meza.

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Mientras el padre del decesado, quien dejó en la orfandad a una niña de 10 años,  sostenía su fotografía, la mujer contaba que su hijo le había dicho que tenía planes de visitarlos el próximo junio.

“Justo hace unas dos semanas le envié el récord policial para que arreglara sus papeles y pueda viajar sin problemas”, contó Graciela.

Los hermanos de Jorge realizan los trámites de repatriación del cuerpo en la Defensoría del Pueblo, mientras que otra hermana que está en España es la encargada de hacer los papeleos del seguro.

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El accidente ocurrió cuando Jorge Meza se dirigía a la localidad de Fuensalida, en compañía de su jefe Vicente Pascual, quien también falleció. En el percance murieron otros dos trabajadores y resultaron heridos cuatro de sus compañeros de labores, quienes iban a trabajar a una construcción.