El juez del caso de Michael Jackson, artista acusado de abusar de un menor, prevé decidir este lunes si los fiscales pueden hablar al jurado sobre pasadas acusaciones de abuso sexual vertidas sobre la estrella del pop, algo que los expertos legales dicen que podría ser lo más importante del juicio.
 
Entre los testigos a los que los acusadores quieren llamar está un joven a quien supuestamente Jackson pagó millones de dólares a mediados de los 90 para que retirase las acusaciones de abuso y quien podría ayudar a presentar al cantante de 46 años como un agresor de menores en serie.
 
"La decisión de mañana del juez puede literalmente decidir el caso", dijo el domingo Jim Hammer, un fiscal de San Francisco y analista judicial en los medios. "Si autoriza este testimonio y si las supuestas víctimas anteriores testifican de forma convincente, será muy difícil que la defensa pueda sobreponerse".
 
El juez del Tribunal Superior Rodney Melville dijo la semana pasada que tenía la intención de pronunciarse sobre el asunto el lunes.
 
Jackson está acusado de haber abusado sexualmente de un niño de 13 años en su rancho de Neverland y de haber emborrachado con alcohol al joven para llevar a cabo su cometido. El cantante también está acusado de haber conspirado para cometer secuestro, extorsión y retención ilegal.
 
Jackson nunca enfrentó cargos de ningún delito en las pasadas acusaciones, pero los fiscales quieren convencer a los miembros del jurado de que el autoproclamado "Rey del Pop" tiene un patrón de conducta hacia los chicos jóvenes, algo que los expertos legales dicen que podría resultar devastador para la defensa.
 
Los abogados de la defensa esperan argumentar que tal testimonio sería injustamente perjudicial para Jackson.
 
Si el juez permite a los fiscales utilizar el testimonio, aún se enfrentan a otro obstáculo: conseguir que pasados acusadores testifiquen ahora contra Jackson. El joven, que ahora tiene 20 años, está supuestamente poco dispuesto a participar en el actual juicio.
 
El domingo, Jackson dijo durante un programa de radio que era inocente, calificando las acusaciones contra él como "totalmente inventadas".
 
"Soy un luchador y sé lo que hay dentro de mí", dijo el cantante al reverendo Jesse Jackson en su programa.
 
"Pero es muy doloroso. Al fin y al cabo aún soy humano, y me hace mucho daño".