Cinco altares y una imagen de San Antonio, ubicados en la parte lateral derecha de la entrada a la iglesia Nuestra Señora de los Ángeles, conocida como San Francisco, son restaurados por quince miembros del Centro de Arte y Restauración El Vitral, de Quito.

Los retablos de madera –ubicados cerca del altar mayor– son los de: San Antonio, Corazón de María, la Inmaculada Concepción, Santa Marianita y la Sagrada Familia. Actualmente están cubiertos con plásticos blancos.

En cuatro de estos espacios hay letreros que anuncian que se están restaurando, y el último se fumigó. Los altares pertenecen al periodo moderno de inicios del siglo XX, según Xavier Molina, miembro del centro El Vitral.

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“Estamos trabajando desde agosto en la restauración y conservación del patrimonio de esta iglesia, que incluye la imaginería policromada compuesta por cuatro pinturas de caballete, todas las imágenes del altar mayor y el altar”, agrega.

Los expertos hicieron una investigación sobre el origen de los retablos del templo.

Determinaron que algunos fueron rescatados de la iglesia primitiva. “Han sido intervenidos (restaurados) varias veces, el pan de oro original fue repintado con purpurina”, indica Molina.

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Además, el comején afectó gran parte del interior de las estructuras hechas con varios tipos de madera, entre los que destaca el cedro. 

Estos segmentos fueron reemplazados por nuevos paneles, que se pintaron con purpurina dorada, a modo de prueba, indica Molina. Ese material será reemplazado por pan de oro.

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“Hemos recuperado al máximo el pan de oro que queda en los altares”, acota.

De los cinco retablos en los que están trabajando los restauradores, está listo el del Corazón de María.

Gran parte de la estructura del altar de San Antonio, que es de madera blanca con relieves en pan de oro, está terminada.

Al momento los restauradores trabajan en el lienzo empotrado en la pared de esa área del templo.

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Según el padre Ernesto Echeverría, párroco de Nuestra Señora de los Ángeles, hasta el momento la comunidad de los franciscanos –que rige esa iglesia– han invertido 60 mil dólares en los trabajos.

El personal del Centro de Arte y Restauración El Vitral laborará en el lugar por seis meses más, según Molina.