Chile pide diálogo con Perú para aclarar caso de armas

Las autoridades chilenas mantuvieron cautela ayer frente al impasse con Perú por una supuesta venta de armas de Chile a Ecuador, pero insistieron en su propuesta de diálogo para “aclarar lo que haya que aclarar”.

“La Cancillería hizo todas las declaraciones ayer, no tengo nada más que  agregar”, afirmó el presidente Ricardo Lagos, en alusión a la propuesta que Chile entregó en la víspera a Perú para que se reúnan los cancilleres y ministros de Defensa de ambos países. “Todo tranquilo”, dijo.

El ministro de Defensa chileno, Jaime Ravinet, aludió a “una escalada mediática” en la prensa como factor que encendió el entredicho, después que el lunes pasado el general retirado ecuatoriano Víctor Manuel Bayas denunciara en Quito que Chile vendió armas a Ecuador, violando un embargo internacional, en pleno conflicto bélico con Perú, en enero de 1995.

No obstante, ayer Bayas confirmó la versión de Chile que indica que ese país le vendió armas a Ecuador solo antes de que se desatara una guerra con Perú, librada a inicios de 1995.

“El gobierno chileno y las autoridades civiles y militares del hermano país (Chile) se han referido con toda amplitud a los hechos; y, por cuanto los mismos se sujetan estrictamente a la verdad, debo manifestar que ese pronunciamiento oficial del hermano país deja explícitamente agotado el tema”, expresó Bayas.

Mientras tanto, los cancilleres chileno, Ignacio  Walder, y peruano, Manuel Rodrigues Cuadros, se reunieron ayer en Marruecos para superar la crisis diplomática surgida por la supuesta venta de armas de Chile a Ecuador, durante una guerra no declarada a Perú.

Chile y Argentina –que también se vio involucrada en un escándalo de venta de armas a Ecuador– oficiaban de garantes de la paz entre peruanos y ecuatorianos.

En un primer comunicado, el martes, Chile precisó que su última venta de armas a Ecuador fue en septiembre de 1994, cuatro meses antes de la guerra entre Ecuador y Perú.

La postura chilena la respaldó desde Quito el comandante del Ejército ecuatoriano, general Luis Aguas.