El satanismo, ligado a la extrema derecha y arrastrado por la "cultura gótica" entre los adolescentes, progresa en Francia, lo que preocupa a los responsables de la protección de la juventud y de la lucha contra las sectas.
 
El último informe de una misión interministerial de vigilancia y de lucha  contra este campo sensible de las sectas, pone en guardia contra este fenómeno,  muy extendido entre los adolescentes.
 
Según el informe, se está produciendo una "progresión sensible de derivas  satanistas en Francia" ligadas a la extrema derecha, como demuestra el aumento  de profanaciones de cementerios donde los símbolos satánicos no difieren mucho  de los símbolos nazis.
 
"Si bien la acción de los grandes movimientos sectarios se calma", subraya  el presidente de la misión, Jean Louis Langlais, "la actividad de los pequeños  grupos se diversifica" y "los tiempos que corren son propicios a las derivas  sectarias".
 
Dicha misión interministerial, encargada de proteger a los menores, alerta  sobre "un movimiento muy presente en internet que, para reclutar nuevos  adeptos, se aprovecha de la cultura gótica, postura estética muy a la moda  entre los adolescentes".
 
Dominique Bitton, que ha dirigido un estudio sobre las páginas góticas en  internet, pone de relieve los "lazos difusos" entre gotismo y satanismo, que  llevan a páginas mucho más radicales, como las neonazis.
 
En un artículo titulado "el satanismo, trampolín de la extrema derecha", el  diario Liberation recuerda que "el origen del movimiento satanista actual está  en la Iglesia de Satán , fundada el 30 de abril -día de la muerte de Hitler-  de 1966".
 
Cita a Paul Aries, autor del libro "Satanismo y vampirismo, el libro  negro", para quien "el desarrollo del satanismo y su acercamiento con la  extrema derecha están ligados con la crisis de valores".
 
La misión interministerial advierte contra el "Black Metal" escandinavo  donde la música es utilizada para profesar ideas neonazis, y contra los riesgos  de "amalgamas" con el movimiento gótico. También subraya que no conviene ser  "ni demasiado alarmistas ni demasiado cándidos".
 
El informe está preocupado también por la "banalización del esoterismo y  del ocultismo" y de que lo que puede esconderse tras las "medicinas que se  proclaman suaves o paralelas". Denuncia también los régimenes "higienistas", a  veces propuestos por casas de ayuno, y cita el caso de un bebé de 17 meses,  muerto a raíz de un régimen vegetariano inadecuado.
 
La misión subraya también "los peligros que se hace correr a los menores  por la pertenencia de su familia" a una secta y denuncia por ejemplo la  iniciación a los placeres para menores que preconizan los raelianos.
 
Entre las otras evoluciones recientes, el informe resalta los intentos de  infiltración de las empresas por sectas y el desarrollo de grupúsculos, como el  grupo Neofaro (secta apocalíptica) cuyo gurú Arnaud Mussy ha sido condenado a  tres años de cárcel.

Por último, la misión señala la "maraña" de sectas más antiguas, como la de  los adeptos Ron Hubbard (Escientología) y Moon.