El español Fernando Alonso (Renault)  logró la madrugada de ayer su segunda victoria en el Campeonato Mundial de Fórmula Uno al imponerse en el horno de Sepang, escenario del Gran Premio de Malasia.

En su agenda tenía señalado el circuito  como favorable para lograr la victoria, y no dio la menor oportunidad a sus rivales dominando la carrera de principio a fin en el circuito en el que, hace dos años, se convirtió en el piloto más joven de la Fórmula Uno en conseguir la pole y subir al podio,  y  repitió ayer aquel logro.

Mientras el equipo francés celebró otra vez, la escudería italiana Ferrari, ganadora del último Campeonato Mundial de Constructores, volvió a tener problemas. El alemán Michael Schumacher, siete veces campeón del mundo y defensor del título, terminó séptimo, mientras que su compañero, el brasileño Rubens Barrichello, tuvo que abandonar con un alerón roto a seis vueltas del final.

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El  italiano Jarno Trulli fue segundo, a 24,3 segundos de Alonso, y pasó a la historia al conseguir el primer podio de la historia para la escudería japonesa Toyota desde que se incorporó a la Fórmula Uno en el 2002.

El alemán Nick Heidfeld (de la escudería Williams) finalizó tercero después de largar en el décimo puesto, mientras que el colombiano Juan Pablo Montoya fue cuarto con su McLaren Mercedes.

Alonso, quien largó primero y completó las 56 vueltas de recorrido en una hora, 31 minutos y 33,736 segundos, suma ya 16 puntos en el Campeonato Mundial de Pilotos, en el que le lleva seis de ventaja a su compañero de equipo, Giancarlo Fisichella. Renault lidera también el Campeonato de Constructores con 26 unidades.

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MONOPLAZAS

HISTÓRICO
Gracias a los puntos obtenidos por su victoria en el Gran Premio de Malasia, así como a los ganados en el de Australia, Fernando Alonso se convirtió en el primer español en liderar el Campeonato Mundial de Fórmula Uno.

DESHIDRATADO
Pese a la importancia de su triunfo, el piloto de Renault casi no celebró en el podio debido a una baja de tensión provocada por la deshidratación que sufrió al dañarse el dispositivo para beber agua en el monoplaza.

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DECEPCIÓN
El séptuple campeón mundial, el alemán Michael Schumacher, volvió a decepcionar al terminar séptimo con su Ferrari y sumar apenas sus dos primeros puntos del año.