La Policía Nacional debería tener un mejor sistema de control para atender a las personas que solicitan su ayuda.

Un vecino se da el gusto de hacer durante todo el día escándalo terrible, con su equipo de sonido. Antes se llamaba al 101 y nunca venían los guardias; esta vez, fue mi esposo a pedirle que baje el volumen, aquel se enojó y el asunto terminó en pelea. Ante esa actitud negligente mi pareja decidió no seguir la discusión, pero el otro, con arma en mano, ingresó a mi domicilio tumbando a patadas la puerta, con la intención de agredir.

Nos vimos obligados a encerrarnos en una habitación y llamar a la Policía, mientras en la sala mi padre era golpeado. Luego de varias llamadas nuestras y de una vecina, la Policía se presentó una hora después. Si mi esposo no hubiera tenido dónde refugiarse, el tipo lo mataba.

Publicidad

Pido a las autoridades que agilicen las llamadas de auxilio para evitar desgracias.

Ustany Tola Gallegos
Guayaquil