Un tramo del poliducto Santo Domingo-Quito-Macul, ubicado en el sector de Tinalandia, a 6 kilómetros de la estación de Santo Domingo de los Colorados, se rompió la madrugada de ayer a causa de la corrosión en la tubería.

El daño se produjo a las 02h15 y provocó el derrame de 500 barriles de diésel 2 (21.000 galones) y la suspensión del bombeo de otro tipo de combustibles.

Sucre Nevárez, vicepresidente de Petrocomercial, reconoció que en la parte inferior del tubo –enterrado– había corrosión por falta de mantenimiento.

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La rotura, sin embargo, no provocará desabastecimiento de combustible, aclaró el funcionario. Justificó el descuido  en la falta de recursos y en la demora que registran las transferencias desde el Ministerio de Economía.

El daño acelerará la contratación de una empresa que establecerá los sitios más vulnerables de los 252,87 kilómetros de tubería desde Esmeraldas a Quito.

Los términos de referencia para el concurso están listos y en 15 días, dijo Nevárez, se iniciará el proceso. El derrame, según Petrocomercial, está controlado; y a pesar de que hubo contaminación, el titular de la filial lo calificó “de pequeño impacto”.

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El personal de operaciones tenía previsto reparar el daño hasta las 17h00 de ayer.