Los grupos extremistas palestinos accedieron este jueves a extender una tregua con Israel hasta fin de año, a condición de que los israelíes suspendan la violencia hacia los palestinos y liberen a prisioneros, dijeron los participantes en las reuniones que se celebran en El Cairo.
 
El primer ministro israelí Ariel Sharon consideró que el comunicado de los palestinos es   un primer paso positivo. Un comunicado de la oficina de Sharon indicó que su comentario lo hizo al presidente egipcio Hosni Mubarak, quien había llamado al gobernante israelí para ponerle al tanto sobre lo dicho en las conversaciones entre las facciones palestinas.
 
Así como el primer ministro enfatizó que este es sólo un paso provisional, y para que los esfuerzos de paz puedan avanzar, las organizaciones terroristas no pueden seguir existiendo como grupos armados, y ciertamente no como grupos dedicados al terrorismo, afirmó el comunicado.
 
El líder palestino Mahmud Abbas accedió a una tregua de hecho en una reunión con Sharon el 8 de febrero. Desde entonces los ataques de extremistas se han reducido considerablemente, pero un atentado suicida en Tel Aviv a fines de febrero provocó que Israel se retractara de algunas de sus promesas, y Abbas deseaba fervientemente que los extremistas se unieran a la tregua para impulsar el frágil proceso de paz.
 
Lo que se ha acordado es que el período de calma tendrá un plazo límite, que es el fin de año, dijo Mohamed Nazzal, uno de los líderes de Hamas.   Esto es a cambio de un compromiso israelí para detener la agresión al pueblo palestino y liberar a todos los prisioneros.
 
En una advertencia a Israel, Nazzal añadió que   en nuestras manos estará suspender el período de calma, especialmente si no se cumple lo pactado.
 
No es la primera vez que los grupos extremistas suspenden los ataques. En el 2003, accedieron a cancelarlos por varias semanas.
 
Un comunicado difundido el jueves por las facciones indicó que habían acordado   un programa para el año 2005 centrado en continuar con el actual ambiente de calma, a cambio de un compromiso israelí para suspender todas las formas de agresión a nuestra tierra y al pueblo palestino, y también la liberación de los prisioneros.
 
Esas condiciones le permitirían a Hamas y a la Yihad Islámica, los principales grupos detrás de los ataques, a abandonar la tregua en cualquier momento, porque es poco probable que Israel acceda a su exigencia de liberar a unos 8.000 prisioneros palestinos que permanecen en cárceles israelíes.
 
Sin embargo, si Israel hace gestos de buena voluntad, los extremistas se verían presionados a observar la tregua. Ranaan Guissin, asesor de Sharon, insinuó el jueves que Israel podría cumplir una promesa de liberar a 500 prisioneros si le satisfacen las medidas que tome la Autoridad Palestina.