El presidente venezolano, Hugo Chávez, afirmó hoy que su Gobierno quiere "poner en positivo" las relaciones con EE.UU., y habló de la necesidad que tienen ambos países de "cuidar" los nexos bilaterales.
 
"Queremos poner el tema de EE.UU. en positivo (...) queremos seguirle enviando todos los días 1,5 millones de barriles de petróleo, queremos seguir haciendo negocios" con ese país, declaró Chávez a la prensa.
 
Destacó que "cada vez" que su Gobierno ha dicho "cosas a veces muy duras" en contra de EE.UU. "ha sido respondiendo a las agresiones" de la administración del presidente estadounidense, George W. Bush.
 
Chávez también aclaró que su reiterada amenaza de suspender el suministro de crudo a EEUU. se circunscribe a la eventual concreción de una "invasión a Venezuela" y del "magnicidio" en su contra que tendrían en mente "sectores demoníacos" estadounidenses.
 
"Yo lo que he dicho es que si en EE.UU. a alguien se le ocurre la locura de invadirnos, que se olviden del petróleo venezolano. Sólo en ese escenario o en el escenario del magnicidio. Ahora, esas son hipótesis que nosotros no queremos que ocurran, y espero que tampoco EE.UU.", señaló Chávez.
 
Venezuela es quinto exportador mundial de crudo y cuarto abastecedor de EE.UU., a donde destina cerca de un 80 por ciento de su producción petrolera, según datos oficiales.
 
Antes de incorporarse a una reunión ministerial, Chávez dijo a los periodistas que su Gobierno ha observado de "buena manera" el hecho de que la Secretaria de Estado de EE.UU., Condoleezza Rice, no ha dicho "nada malo de Venezuela" en sus últimas apariciones.
 
"Hemos recibido con buena disposición esa forma como la Secretaria de Estado (Rice) ha respondido en México, que Venezuela es un país democrático, prácticamente lo dijo. Ojalá que no vuelva a sus andanzas mañana, a estar diciendo que Chávez es una amenaza, no. Yo no soy ninguna amenaza", dijo el jefe de Estado.
 
Atribuyó ese aparente cambio de tono al hecho de que Washington "debe estar leyendo las reacciones latinoamericanas" al supuesto intento de la Casa Blanca de "aislar" a Venezuela.
 
Chávez citó las recientes declaraciones en Washington del ministro de Relaciones Exteriores chileno, Ignacio Walker, y también las de Marco Aurelio García, asesor diplomático del presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, en supuesta defensa de Venezuela.
 
Washington "debe estar leyendo la respuesta del canciller chileno que dijo que EE.UU. no debe ver a Venezuela en blanco y negro, que esos llamado a aislar a Chávez fracasarán, que debe entender (EE.UU.) que Latinoamérica trabajará con Chávez, no contra Chávez", afirmó el gobernante.
 
"EE.UU. debe ver esa luz y cuidar esas relaciones con Venezuela (...) estoy seguro que empresarios de EE.UU. que hacen negocios aquí van a defender la tesis de que EE.UU. necesita buenas relaciones con Venezuela y viceversa", subrayó Chávez.
 
Las tensiones en la siempre complicada relación entre Caracas y Washington desde 1999 se han disparado en los últimos meses debido a las fuertes críticas que se han reiterado mutuamente ambos gobiernos.
 
Con la llegada de Chávez al poder, en febrero de 1999, los roces entre Caracas y Washington han sido casi permanentes.
 
Las críticas de EE.UU. se refieren a la supuesta intención "totalitaria" de Chávez, mientras las venezolanas denuncian la presunta actitud "imperialista e intervencionista" de EE.UU. en Venezuela.
 
En septiembre pasado, Chávez manifestó su interés en "mejorar" las relaciones con la Casa Blanca, al tiempo que el embajador de Estados Unidos en Venezuela, William Brownfield, sostuvo entonces su intención de "explorar la posibilidad de mejorar las relaciones bilaterales".