El enlace no será televisado, ni se facilitará una foto oficial de la ceremonia. La sala donde se realizará el matrimonio solo tiene espacio para  treinta personas. Todo modesto, frente a la fastuosidad que tuvo la boda de Carlos con Lady Di.

La boda civil de Camilla Parker Bowles y el príncipe Carlos  será discreta, más propia del británico de a pie que del heredero de la corona, pues no será televisada ni se facilitará una foto oficial de la ceremonia.

 El diario Daily Express señaló ayer que el enlace del Príncipe de Gales distará mucho de la gran pompa que rodeó su boda con Lady Di, evento que paralizó al Reino Unido y fue seguido por 750 millones de personas en el mundo.
 
Cuando faltan pocas semanas para la boda, el próximo 8 de abril en el Ayuntamiento de Windsor, a las afueras de Londres, los preparativos son modestos, a tal punto que Carlos reservó por 285 libras (427 euros, equivalente a 567 dólares) la sala Ascot del edificio municipal, donde hay espacio para solo 30 personas.
 
El citado rotativo informa de que la ceremonia durará 15 minutos y no será televisada, como puede que tampoco se vea en la pequeña pantalla la bendición, que tendrá lugar después en la capilla de San Jorge, en el castillo de Windsor.

En un principio, el matrimonio civil iba a celebrarse en el gran salón del Ayuntamiento, donde hay lugar para cien personas, pero se optó después por Ascot debido a los problemas de seguridad, indica  el Daily Express.
 
Además se espera que Carlos y Camilla, una vez casados, recorran en automóvil y no en carroza el corto trayecto entre el municipio y el castillo, para decepción de los seguidores, agrega el diario.
 
El enlace ha sido motivo de polémica por la decisión de la reina Isabel II de no acudir a la ceremonia civil y por los continuos interrogantes sobre si esta boda es legal o no. Sí asistirán los hijos de Carlos, los príncipes Guillermo y Harry.

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Excluida

NO SERÁ REINA
Camilla  no será Princesa de Gales (como sí lo fue Lady Di) sino duquesa de Cornualles cuando se case con Carlos, y tampoco llevará nunca el título de reina. En caso de que su futuro marido acceda a la Corona, su título será el de princesa consorte.

DESAIRE
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, no desea agasajar en la Casa Blanca a la futura esposa de Carlos de Inglaterra por tratarse de una divorciada. Eso echa por tierra el plan que tenía Carlos de llevar a su nueva pareja a una gira oficial por Estados Unidos este mismo año.

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AUSENTE
Camilla no asistió al banquete que el presidente italiano, Carlo Ciampi, ofreció anoche en Londres en honor a la reina Isabel II.