El alemán Paúl Schaefer, líder de la Colonia Dignidad, prófugo de la justicia chilena desde 1996 y acusado de abusos a menores y violaciones a los derechos humanos, retornó a Chile la madrugada de ayer en un avión militar que lo trasladó desde Argentina.

Schaefer, de 83 años y ex cabo del ejercito nazi, capturado el jueves en Buenos Aires, fue expulsado de Argentina por disposición del gobierno, que atendió una petición directa del presidente chileno Ricardo Lagos con el fin de evitar un largo proceso de extradición.

En Parral, Chile el vocero de la controvertida colonia Dignidad, Michael Muller, admitió ayer que en ese lugar se violaron los derechos humanos y afirmó que el enclave está dispuesto a colaborar con la justicia chilena.