El español Francisco Pacheco fundó la ciudad de San Gregorio de Puerto Viejo el 12 de marzo de 1535.

Conocida como la Ciudad de los Reales Tamarindos, Portoviejo cumple hoy 470 años de fundación española, con actos cívicos organizados por  las autoridades locales.

Se caracteriza por su movimiento comercial, sin embargo la ciudadanía aún espera el mejoramiento de servicios básicos, como la red de agua potable y arreglo de  calles.

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Según el presidente de la Junta Cívica, Guido Carranza Acosta, se espera que el Gobierno asigne recursos para ejecutar estas obras y que el Municipio elabore un plan de desarrollo integral e identificar las fortalezas del cantón.

Patricia Briones de Poggy, alcaldesa del cantón, dice que reconoce los problemas que tiene la ciudad, pero señala que para superarlos se necesita de la fuerza de voluntad y el trabajo de los habitantes.

Pero ambos destacan el cariño que sus moradores tienen por esta ciudad: “Portoviejo es una ciudad acogedora, donde todavía se puede sentir el calor humano que se ha perdido en otras ciudades, debido a que el desarrollo arquitectónico le ha ganado espacio al hombre”, expresa Carranza.

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Historia
Según investigaciones de la historiadora Tatiana Hidrovo, la fundación de Portoviejo se la realizó por varias razones.

Una de ellas fue el hecho de que los conquistadores eran “empresarios privados” avalados por la corona española; también sintieron la necesidad de colocar un hito de frontera con los territorios conquistados por Francisco Pizarro, pero sobre todo porque era gran productora de maíz y había abundante agua.

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“La ciudad se funda a tres leguas de la desembocadura del río Portoviejo, es decir,  a unos 15 kilómetros; un informe realizado por un funcionario de la Corona señala en 1605 que la ciudad para esa fecha ya había sido reasentada dos veces”, indican los textos de Hidrovo.

El asentamiento español tuvo el nombre original de Villa de Villanueva de San Gregorio de Puerto Viejo y en 1605 ya se la llamaba “ciudad”, título que otorgaba la Corona a una comunidad española.

En sus inicios fue denominada junto con Guayaquil como “Ciudad de Blancos”.