El papa Juan Pablo II será dado de alta el 14 o el 15 de marzo, dijo este sábado su secretario particular, el arzobispo Estanislao Dziwisz, al sacerdote polaco Richard Nitschke, según aseguró éste.
 
Así lo declaró tras abandonar el Policlínico Gemelli de Roma, donde acudió con un grupo de vecinos de Wadowice, la localidad polaca donde nació el Papa, para interesarse por su estado de salud, desearle una rápida mejoría y animarle a viajar de nuevo a Polonia donde -dijo- le esperan con los brazos abiertos.
 
"El secretario personal del Papa nos ha dicho que las condiciones de salud del Pontífice están continuamente mejorando y que es posible que Juan Pablo II sea dado de alta el lunes o el martes próximo", afirmó Nitschke.
 
El portavoz vaticano, Joaquín Navarro Valls, ya aseguró el 10 de marzo que el anciano Pontífice, que en mayo cumplirá 85 años, regresará al Vaticano "antes de Semana Santa", que comienza el 20 de marzo, Domingo de Ramos.
 
Navarro no precisó la fecha, pero a la pregunta de si sería el día anterior, es decir el sábado 19, manifestó: "puede ser antes".
 
Como el próximo parte médico se dará a conocer el lunes 14 y Navarro dijo el pasado jueves que el Papa prolongaría "unos días más" la hospitalización por consejo de los médicos, en ambientes vaticanos no se descarta que el lunes anuncie el alta y el regreso al Vaticano.
 
Las declaraciones del sacerdote polaco refuerzan esa posibilidad, que se ha fortalecido aún más después de que ayer, viernes, el Vaticano difundiera una grabación de la misa celebrada en esa jornada por el Papa en la que se le oye decir con claridad "va bene" (está bien)", las primeras palabras que se le escuchan desde el 24 de febrero, cuando fue sometido a una traqueotomía.
 
 Fueron pronunciadas con voz ronca, pero suficientemente clara, y con las mismas se pone fin a un silencio que duraba 16 días y que había desatado todo tipo de especulaciones sobre si el Papa había perdido la voz.
 
El portavoz Navarro Valls dijo hoy tras visitarle, como hace a diario, que Juan Pablo II habla con sus colaboradores desde hace ya varios días.
 
"La de ayer ha sido la primera charla del Papa que se ha escuchado fuera, pero desde hace días ya hablaba con sus colaboradores", precisó.
 
Recientemente el cardenal Joseph Ratzinger, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, aseguró, tras despachar con el Papa en el Gemelli, que el Obispo de Roma le había hablado en italiano y alemán. Otros cardenales también destacaron la recuperación del habla.
 
En la grabación de la misa se vio como Juan Pablo II, que mostraba aspecto cansado y más delgado, pronunciaba -aunque no se entendió- la frase "nuestro auxilio está en el nombre del Señor", seguida, en la misma línea, de "...Dios todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo".
 
Pero después, cuando hablaba con dos prelados africanos asistentes a la misa y uno de ellos le expresaba su solidaridad, respondió ya con voz más clara "va bene" ("está bien").
 
Tras el anuncio del sacerdote Nitschke, todas las miradas están puestas en el Angelus de mañana, domingo.
 
Aunque el esquema previsto es que el rezo lo dirigirá el arzobispo Leonardo Sandri, "numero tres" del Vaticano, desde la plaza de San Pedro y el Papa lo seguirá por televisión desde el Gemelli, no se descarta que -vista la favorable evolución de la convalecencia y la recuperación de la voz- cuando se asome a la ventana para impartir la bendición pronuncie algunas palabras. 
 
Este sábado se vio a los técnicos del Centro Televisivo Vaticano (CTV) haciendo pruebas de imagen y sonido en previsión del rezo del Angelus de mañana en el Gemelli.
 
A la espera de recibir el alta cuanto antes, según Navarro no ve la hora de regresar al Vaticano, el Papa prosiguió hoy con sus ejercicios para recuperar la voz y para respirar y, aunque a ritmo lento, con su trabajo.
 
Este sábado envió un mensaje a los participantes en un convenio organizado por la Penitenciaria Apostólica y nombró un obispo para la India y a los presidentes, relator y secretario general del próximo Sínodo de obispos que se celebrará en el Vaticano en octubre próximo.