Angel María Villar, presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), dijo ayer en Melilla, en alusión al denominado caso Henry, que “racistas son los que persiguen a Luis Aragonés, pues ya ha pedido disculpas por si alguien se sintió molesto”.

“Ya ha pedido perdón, déjenle en paz”, resaltó el presidente de la RFEF, quien añadió que no entiende toda la polémica creada por los insultos que vertió el seleccionador hacia el delantero negro del Arsenal Thierry Henry, cuando trataba de motivar al jugador español Antonio Reyes.