Peligrosas obras de la telefonía

Soy un profesional retirado que habita en una casa y terreno de su propiedad en el cerro de Angahuel, en el recinto Palmar del cantón Santa Elena.

Este cerro es ahora conocido con el nombre de “Cerro de las antenas”, porque compañías de telefonía móvil han erigido sendas antenas, y no tendría nada de raro si no fuera porque estas han sido colocadas cerca de mi casa, y una de estas –de la mitad superior a la base– da la sensación de fragilidad.

Llamé a la empresa de telefonía celular a la cual le pertenece esa antena, y le manifesté mi inquietud; me dijeron que “ese era el diseño” y que “no me preocupara”. Ese debe ser un diseño bastante económico, porque cuando uno mira las otras dos antenas pertenecientes a otras dos comunicadoras, nota una diferencia bastante grande.

Tenga o no tenga razón, yo agradecería que cualquier autoridad técnica opinara al respecto, constatando esta circunstancia.

Dr. Raúl Nicolás Mejía Dueñas
Palmar

La ciudadela Miramar, de Punta Carnero, es una zona exclusivamente residencial, sin embargo, cierta compañía de telefonía celular, violando los más elementales principios de urbanismo, ética, orden e impacto al medio ambiente está construyendo una torre de 28 metros de altura para reproducir su señal, en un terreno de este sitio, en pleno malecón y contiguo a varias residencias particulares.

Hace unos días el Comité de Medio Ambiente de la Asociación de Moradores de Punta Carnero se reunió con un delegado del Alcalde para tratar problemas de la ciudadela, principalmente sobre la ocupación de terrenos en negocios no aptos para la tranquilidad y seguridad de la zona.

Invocamos a esa empresa de telefonía móvil su predisposición de servicio a la comunidad, que ha demostrado durante su tiempo de operación, para que interrumpa esa construcción, y hacemos un llamado al Alcalde para que en la brevedad posible ordene la detención de la instalación de la torre.

Dr. Eduardo Alcívar Andretta
Guayaquil