El Congreso boliviano rechazó la noche de este martes por unanimidad la renuncia que el presidente Carlos Mesa presentó la víspera.
 
La renuncia del mandatario acosado por presiones sociales y regionales fue  rechazada sin debate y en dos instancias, por aclamación y por signo  (levantando la mano).
 
En menos de cinco minutos, 157 congresales desestimaron la dimisión del  gobernante.
 
Con la aquiescencia de los legisladores, el presidente del Congreso  boliviano, Hormando Vaca Diez, invitó acto seguido a Mesa, que se encontraba en  el palacio Quemado, al hemiciclo parlamentario, donde prevé dar un discurso.
 
Una comisión de congresistas partió hacia las 21H30 locales (01H30 del  miércoles) para flanquear el arribo del gobernante al edifico legislativo, en  medio de un fuerte resguardo policial desplegado en la Plaza de Armas de La Paz, donde medio millar de personas vitorean al gobernante.