Los propietarios de las agencias de envíos en Nueva York están preocupados por el avance del servicio de transferencias ofrecido por los bancos, lo cual está provocando el cierre de los couriers, publicó el viernes pasado el periódico neoyorquino Hola Hoy.com.

Según este medio, las empresas de envíos están al borde de cerrar sus operaciones, mientras otras ya lo han hecho porque los grandes bancos que otrora los apoyaban no quieren seguir haciendo negocios con ellos, pues argumentan que a través de esas empresas se realizan transacciones de lavado de dinero. 

El asambleísta neoyorquino Adriano Espaillat considera que los bancos lo que quieren es “monopolizar” el negocio del envío de remesas a Latinoamérica, para dejar así por fuera a los pequeños comerciantes hispanos de Estados Unidos.

Publicidad

“Yo creo que todo esto (del lavado de dinero) es una excusa para no hacer negocios con las pequeñas empresas. Porque si realmente la preocupación es el lavado de dinero, (hay que mirar) dónde se han detectado grandes casos de lavado de dinero a altos niveles, y esto es en las mismas instituciones bancarias... incluyendo Citibank, por ejemplo”, dijo Espaillat a Hola Hoy.com.

Las remesas de los inmigrantes en Estados Unidos hacia América Latina,  según estimaciones, representarán 40.000 millones de dólares este año.

En el caso de Ecuador, el ingreso de remesas de los emigrantes constituye la segunda fuente de divisas al país, después del petróleo, solo en los últimos nueve meses del 2004 el envío de dinero fue de 1.181’400.000 dólares. 

Publicidad

Hasta la fecha, solo dos bancos ofrecen estos servicios a las pequeñas empresas de envío de dinero: Northfolk y JPMorgan Chase Bank. No obstante, ambas instituciones fijaron como plazo límite para estas operaciones el próximo 31 de marzo. Después, si no se toma otra decisión, al menos unos 70 de estos pequeños negocios tendrán que cerrar sus puertas y dejarán sin empleo al menos a unas   20.000 personas.

“Fuimos pioneros”
La preocupación por el cierre de las agencias de envíos en Nueva York también se traslada a los propietarios de los couriers en Ecuador, quienes trabajan paralelamente con sus similares en EE.UU.

Publicidad

“Fuimos los pioneros en servir a los emigrantes,  ahora los banqueros  quieren aprovecharse de la situación”, dijo el presidente de la Asociación de Correos Privados del Guayas, Walter Freire.

Freire destacó como un falso pretexto el argumento que los couriers son utilizados para transacciones  de lavado de dinero. “Para enviar una remesa desde Nueva York se pasa por varios filtros con un sistema electrónico de información completa del remitente, si la cantidad excede los mil dólares se refuerza la información de la procedencia y el destino de ese dinero”, precisó.

El directivo añadió que mensualmente las agencias reciben un promedio de 2 millones de dólares, mientras en diciembre sube a 4 millones.