El cantante estadounidense Lenny Kravitz se arrodilló, el viernes pasado, en el Palacio de los Deportes de la Ciudad de México, en agradecimiento al público, que le recibió con verdadero fervor en su segunda visita a este país. 

Como respuesta a este acto de humildad, unas 18.000 personas gritaron y corearon al unísono el nombre del artista (Lenny, Lenny,  Lenny), lo que emocionó al cantante.  Kravitz promociona en la gira su disco Baptism.