La Federación Internacional del  Automóvil (FIA) amenazó ayer con no organizar ningún otro certamen deportivo en Australia porque un tribunal civil contradijo su decisión sobre la no participación de la escudería Minardi en los ensayos de Fórmula 1.

El dictamen permitía que la escudería participara en las pruebas de clasificación para el Gran Premio de Australia pese a una prohibición impuesta por los federativos, ante el supuesto incumplimiento de ciertas especificaciones en el diseño de los bólidos de la escudería Minardi.

El presidente de la FIA, Max Mosley, incluso amenazó directamente al patrón de Minardi, el australiano Paul Stoddart, de anular el Gran Premio si no retiraba su denuncia, según manifestó el director de la comunicación de la FIA, Richard Woods.