La reaparición de la amenaza de Usama Ben Laden, líder de la red Al Qaeda, que podría estar planeando un nuevo ataque contra EE.UU., puso en jaque a los responsables de la seguridad estadounidense, aunque estos mantienen la alerta en nivel intermedio.

Las autoridades anunciaron que interceptaron una comunicación en la que Ben Laden pide a su principal aliado en Iraq, Abu Musab Al Zarqawi, que planifique ataques contra EE.UU.

El grupo de Al Zarqawi  reivindicó el atentado cometido el lunes en Hilla, al sur de Bagdad, en el que  murieron 118 personas.