En lo que va de febrero del 2005 se registraron 45 hechos delictivos en diferentes sectores de Guayaquil. De ellos, 22 son crímenes y el resto, robos a personas, locales, express y sacapintas.

En lo que va de febrero, el Suburbio Oeste y el Guasmo en el sur de Guayaquil, así como  diez sectores del norte, seguidos de una parte del centro de la ciudad registraron el mayor número de asesinatos y robos agravados (con uso de armas),  según reportes de la Policía y la Fiscalía.

Los  sitios son:  al norte, las ciudadelas Alborada, Sauces, La Garzota, Kennedy,  Urdesa Norte, la avenida Francisco de Orellana, Urbanor, la Prosperina, el Paraíso de la Flor y la vía a Daule; al sur, parte del suburbio oeste,  el Guasmo Sur, Las Acacias,  la Floresta, el Bastión Popular, Trinitaria y Esteros; y parte del centro, donde hubo 45 delitos.

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Estos hechos comprenden asesinatos, atraco a locales, robo express de carros (incluye la retención temporal de la víctima) y asaltos por sacapintas  (ladrones que identifican a la víctima con dinero o mercadería antes de asaltarla).

En el suburbio se registraron siete asesinatos y el asalto a un local. En la Alborada hubo dos asesinatos, dos heridos y dos robos express. Ayer  se registró el asesinato a balazos de una niña en el Guasmo Sur, y de un joven de 25 años,  en el Paraíso de la Flor.

En el centro se reportaron dos asaltos a establecimientos, dos robos express  y un herido. Mientras que en la vía a Daule, hubo un asalto a un local, dos asesinatos y un atraco cometido por sacapintas.

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Un equipo de este Diario recorrió cinco sectores de la Alborada y cinco del centro de la urbe donde, a pesar de la vigilancia policial y militar, ocurrieron gran parte de los delitos y cuyos moradores, vendedores, dueños y dependientes de negocios informaron de otros delitos comunes.

El subjefe del Comando de Policía del Guayas, coronel Iván Vallejo, explicó que los gendarmes controlan la ciudad las 24 horas, pero que se requiere más personal y colaboración de autoridades seccionales y la ciudadanía para hacer su labor más efectiva.

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Lugares
En la segunda etapa de la Alborada (calles Rodolfo Baquerizo y Puerto Baquerizo Moreno) todavía se comenta el asesinato de Cristhian Molinari Pazmiño, de 32 años, cometido por delincuentes.

“Le dispararon la madrugada del sábado (19 de febrero pasado) porque no se dejó robar”, señaló el propietario de un negocio del sector que no se  identifica “por temor a represalia de los delincuentes”.

Su preocupación es la misma que se evidencia en las palabras y el rostro de un vecino que reside hace 29 años en la zona, cuando se refiere a la peligrosidad del lugar.

“Aquí son comunes en las noches los asaltos a transeúntes y a carros, a pesar del patrullaje policial y la vigilancia permanente de dos policías y un militar ubicados a unos pocos metros (bajo el paso desnivel de las avenidas Rodolfo Baquerizo y Benjamín Carrión)”, comentó.

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El mismo día, en una calle interior de la 8ª etapa de esa ciudadela, fue asesinado el guardia Luis Oña Vela, de 52 años, al tratar de evitar el robo de un vehículo, según su compañero Arístides Bernita.

Ante la falta de celador y la  peligrosidad de la zona, la tarde del martes pasado una moradora hizo colocar más luminarias en los exteriores de su casa para evitar ser atracada cuando regresa de su negocio de comidas, en la 12ª etapa.

Los crímenes de Molinari y Oña son parte de los 22 cometidos en diferentes sectores de Guayaquil, desde el 1 de febrero pasado hasta ayer al mediodía, según reportes policiales.

En el centro de la urbe la situación es similar. La tarde del pasado 15 de febrero fue asaltada la oficina de pagos de la Empresa Eléctrica, ubicada en  Víctor Manuel Rendón y Baquerizo Moreno.

José Quevedo, dependiente de un almacén de venta de celulares en esa dirección, aseguró que allí también es frecuente el robo a pasajeros de buses. “A cuenta de que venden golosinas obligan a la gente a coger caramelos y eso es una forma de robarles”, manifestó. En estas calles pasan las líneas 85, 79, 12, entre otras.

No muy lejos, en Pedro Moncayo y Padre Solano, se registró el pasado 12 de febrero el robo express de un vehículo Chevrolet Vitara.

Ernesto Aguirre denunció que a las 17h00 fue interceptado por dos sujetos que se le llevaron su carro y lo obligaron a subir a otro donde lo retuvieron hasta la 01h00 del siguiente día, cuando lo abandonaron en el kilómetro 15 de la vía a Daule.

Luis Enrique Larrea, empleado de un taller de cerrajería del sector, dijo que los atracos ocurren en la noche y que las víctimas más frecuente son los transeúntes, a pesar de que los patrulleros  pasan hasta tres veces por el sector.

OTROS CASOS

5 DE FEBRERO DEL 2005
Marcos Aguirre Leitgeber, quien iba en su camioneta Nissan 2.200, placas GJH-101, denunció que en el km 6½ de la vía a Daule fue asaltado por tres sacapintas que le robaron 2.200 dólares.

8 DE FEBRERO DEL 2005
Freddy Gabriel Banchón Banchón, de 16 años, y Pablo Esteban Herrera Naranjo, de 14, fueron asesinados a balazos en la  24 y la LL (suburbio) cuando se iban a comprar medicinas.

14 DE FEBRERO DEL 2005
Un grupo formado por entre diez y quince delincuentes asaltó el Mi Comisariato del kilómetro 4½ de la vía a Daule. Dos personas resultaron heridas mientras los delincuentes escapaban por las avenidas Rodolfo Baquerizo Nazur y Benjamín Carrión (Alborada).

17 DE FEBRERO DEL 2005
Dos sujetos asaltaron el dispensario San Agustín, en Luis Urdaneta y Pedro Moncayo. De allí se robaron equipos de ecografía, valorados en 60.000 dólares, y 1.000 dólares en efectivo.