Unos 200 estudiantes del  colegio Benigno Malo mantienen desde el pasado miércoles tomado el plantel ubicado en la avenida Solano de esta ciudad, para exigir la renuncia del rector Rodrigo Palacios.

Los alumnos lo acusan de mala administración por no solucionar problemas como la falta de pupitres y permitir actos de indisciplina, aunque estos no fueron precisados por el presidente del consejo estudiantil, Franklin Guanuche.

La Dirección Provincial de Educación del Azuay, a través de su delegado, David Cajamarca, realizó ayer tres reuniones. Una en la mañana con el consejo directivo, que encargó a Iván Petroff el rectorado, mientras se investigan las denuncias.

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En la tarde y en la noche sesionaron la junta general de profesores y el comité central de padres de familia para analizar un posible apoyo a la medida.

El director provincial de Educación, Romeo Vintimilla, solicitó retornar a la normalidad, tras asegurar que hay procedimientos para tramitar problemas como el suscitado y  no con medidas de presión.

Dijo que la Comisión de Defensa Profesional de la dirección acogió la denuncia y tendrá 90 días para analizar el caso y aplicar sanciones si es necesario; mientras tanto, la autoridad cuestionada puede obtener una licencia de trabajo.