La balada Mi alma entre tus manos, en  representación de Perú, ganó  la madrugada de ayer  el primer premio  del Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar.

Interpretada por  Jorge Pardo, que la escribió junto a los  autores Jéssica Sarango y Andrés Landavere, la composición obtuvo la Gaviota  de Plata de Viña del Mar y un premio de 30.000 dólares.

 Pardo fue galardonado además como mejor intérprete y recibió un premio  adicional: otra Gaviota de Plata  y    10.000 dólares.

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 Mi alma entre tus manos quedó finalista en el festival junto a otras dos melodías que representaban a Estados Unidos y Argentina.

“Cuando anunciaron que   había ganado como mejor intérprete, pensé que eso era todo, nunca imaginé que ganaría las dos Gaviotas”, dijo Pardo ayer.   “Este es un regalo por el cumpleaños de mi madre”, refirió.

Agregó que el triunfo en Viña lo posesiona como figura en Perú y  “es una sonrisa que le voy a regalar a mi país”. Horas antes había abandonado el escenario ondeando la bandera peruana.

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Pero al igual que en versiones pasadas del festival,  el espectáculo paralelo opacó cada noche a la competencia de canciones.

El Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar cerró su versión 2005 la madrugada de ayer con la arrolladora presentación del cantante mexicano Marco Antonio Solís, quien provocó las mayores muestras de histeria de todo el certamen musical.

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La jornada de clausura estuvo marcada también por la exitosa actuación del argentino Diego Torres, los abucheos que recibió la solista mexicana Fey y la fiesta que de madrugada desató la agrupación argentina Los Auténticos Decadentes.

Solís, vestido completamente de blanco, abrió la última noche del Festival, que se inició el miércoles pasado en la Quinta Vergara, en Viña del Mar, 110 km al oeste de Santiago.

El cantante, ex integrante de la legendaria formación Los Bukis, subió al escenario en medio de una ensordecedora ovación de los cerca de 20.000 espectadores que colmaron el anfiteatro.

Su presentación generó las mayores muestras de histeria del evento, con algunas de sus seguidoras desmayadas y otras provocando tumultos al intentar acercarse al creador de éxitos como Si no te hubieras ido y Si te pudiera  mentir.

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El público premió su presentación con la Antorcha de Plata, la Antorcha de Oro y la Gaviota de Plata reservada para los ganadores de la competencia internacional de canciones.

Después de más de dos horas, en las que sus baladas fueron seguidas una a una por un multitudinario coro, Solís bajó del escenario en medio de la misma ovación que lo saludó al comenzar su actuación.

Los gritos que pedían a Solís no permitieron que Fey completara su actuación y la cantante solo alcanzó a estar 6 minutos, antes de ser despedida en medio de abucheos.

La versión  2005 del Festival de Viña del Mar estuvo marcada desde la noche inicial por las  críticas que llovieron sobre al cantantutor venezolano Ricardo Montaner, quien  debutó como animador oficial del certamen en reemplazo del veterano presentador Antonio  Vodanovic.

La recepción para el cantante fue distinta en cada una de las seis noches,  con instantes en que fue aplaudido y otros en que su animación fue reprobada  con un coro de rechiflas.