El 16 de enero del 2004 vencieron los contratos de transporte marítimo de combustible que por un año mantenían las empresas Navipac y Ecuanave con Electroguayas. Esto motivó que en el 2003 la generadora invite a un concurso de ofertas para ese servicio. Participaron entonces tres empresas: Navipac, Ecuanave y Mardcomsa. La primera se abstuvo de presentar ofertas y la segunda, denunció ante el directorio de Electroguayas que el concurso estaba direccionado y beneficiaba a Mardcomsa.
El 8 de diciembre del 2004 y luego de que se emitieron informes de auditoría de Electroguayas y del Fondo de Solidaridad, efectuados en el 2003, se declaró desierto el concurso por irregularidades y se resolvió mantener los contratos vigentes hasta que se haga un nuevo concurso.
Las observaciones que hicieron los auditores fueron: falta de información técnica, de actas del comité del concurso, de votos suficientes del directorio para permitir la adjudicación a uno de los oferentes, entre otros aspectos.