En Cerecita se produce humus de alta calidad

La lombricultura es una actividad que permite obtener múltiples beneficios para la agricultura.

Hundiéndose, huyen de la tenue luz del día, decenas de lombrices rojas apenas Manuel Navia, técnico en lombricultura, levanta con los dedos la húmeda superficie negra del alimento que se les coloca en capas, en uno de los siete lechos de producción de la empresa Humus Nácaro.

En Cerecita, provincia del Guayas, dos socios iniciaron esta actividad en 1998 con 250 m² de lechos de lombrices y una producción anual de  240.000 kilos, sin disponer de mecanización y conceptos técnicos aplicables en nuestro medio.

La ganadería bovina  que establecieron a partir del segundo año asegura el estiércol, principal fuente de materia prima para obtener humus de alta calidad. Su meta es contar con unas 800 cabezas de la raza brahman y llegan a procesar diez millones de kilos/año de humus y para exportar.

En este momento, indica Navia, en los 2.400 m² de lechos con aproximadamente cien millones de lombrices estiman producir dos millones de kilos de humus en el 2005.

La lombriz Eisenea Foétida, sin la humedad y el alimento adecuado, emigraría como las 7.999 especies conocidas.

Es la única que no huye a sus alojamientos originales permitiendo tener poblaciones de hasta  45.000 lombrices/m².

De los lechos forrados con un plástico grueso negro que cubre también las paredes que llegan a los 40 centímetros hasta la última fase cumplidos 90 días, a su vez se recoge –escurrido del humus– un extracto líquido para aplicación foliar, preparación de fórmulas especiales solicitadas  por los agricultores con adiciones de minerales orgánicos para tratamientos de suelos pobres en nitrógeno, fósforo, potasio, o para suelos altamente contaminados con químicos no asimilados por las plantas.

El gerente técnico de Nácaro dice  que la tasa de reproducción de las lombrices rojas californianas quintuplica a las demás, vive un promedio de 16 años, no sufre de ninguna enfermedad, produce un humus de alta calidad, y está siendo utilizada para consumo humano al elaborar  harinas que  contienen del 60 al 80%  de proteínas de alta calidad y bajo costo, además son muy resistentes a condiciones adversas del medio.

En su opinión, la merma de su valioso accionar natural se debe al mal uso de pesticidas, falta de materia orgánica  que es su alimento, falta de humedad (sequía) o zonas anegadas, inadecuadas técnicas de roturación de los suelos, escasez de suelos sanos.

El costo de un pie de cría de lombrices bordea los $ 30/k (1 kilo= 700-900 lombrices adultas con 20% de sustrato) y el valor del humus nacional es mucho inferior al extranjero.
 

Paso a paso

	Estiércol de ganado, residuos de frutas y harinas de maíz y soya, hacen la dieta.
	Manuel Navia enseña la mezcla de las materias primas que sirven de alimento.
	Humus de lombriz que sale de los lechos, previamente tamizado para la venta.
	Extracto líquido de humus que escurre y se recoge en el extremo inferior del lecho.