El presidente cubano, Fidel Castro, advirtió que tomará medidas contra quienes venden ilegalmente medicamentos en la isla, y llamó "al orden" a los responsables de la producción y distribución de medicinas.
 
Castro se refirió a ese tema en un discurso pronunciado el martes en el Congreso del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Salud, al que no tuvo acceso la prensa extranjera y que se transmitió hoy por la televisión estatal cubana.
 
"No puede aparecer alguien vendiendo medicamentos en la esquina, es una desvergüenza del que lo hace y mayor del que lo tolera", recalcó.
 
El mandatario dijo que esos medicamentos evidentemente son "robados o en la farmacia o en la fábrica" y consideró que debían "ser arrestados y juzgados" quienes se dedican a ese tráfico.
 
"En la farmacia tiene que haber contabilidad, medida precisa y exacta", subrayó.
 
Advirtió a los trabajadores del sector farmacéutico, a los funcionarios del Ministerio de Salud Pública y a los responsables de la distribución de medicamentos de que si sigue dándose esa corruptela "procederemos a intervenir las 2.000 farmacias".
 
"Pero que no se crean que puede seguir la blandenguería sin medidas. Podemos preparar personas capaces de administrar farmacias y no nos vamos a quedar con los brazos cruzados", afirmó.
 
Castro dijo esperar que "una advertencia sirva para todos los que tienen que ver con eso, tanto para los productores de los medicamentos como para los administradores de los medicamentos", porque "hay que lograr la disciplina y la administración correcta de los recursos".
 
En otra parte del discurso, el gobernante dijo que en los últimos dos años se destinaron 150 millones de dólares a adquirir nuevos equipos médicos para el sistema de salud pública.
 
 Dijo que Cuba se convertirá en un centro de servicios médicos de "excelencia" para atender a "cientos de miles" de extranjeros y a sus 11,2 millones de habitantes.