El director gerente del FMI, Rodrigo Rato, instó este miércoles a Colombia a aprovechar la situación apacible de la economía mundial para reducir su deuda y mejorar el gasto social con la supresión de los subsidios a los que no los necesitan.
 
En su primera escala en una gira por Colombia, Ecuador, Bolivia y Perú, Rato pidió rectitud fiscal al país en un momento en que el Gobierno del presidente Álvaro Uribe está tentado a gastar más para propiciar su reelección en mayo del año que viene.
 
A pesar de sufrir una guerra civil desde hace décadas, Colombia ha sido tradicionalmente la "niña bonita" del Fondo Monetario Internacional (FMI) en la región andina, debido a la buena gestión de su economía.
 
No obstante, el país sufre de muchos de los males que aquejan a toda América Latina, como el alto endeudamiento del estado y la mala estructura del gasto social y de pensiones, el cual frecuentemente acaba en el bolsillo de los acaudalados.
 
Rato destacó estos problemas en reuniones a puerta cerrada con economistas, legisladores y sindicalistas, en el Jockey Club, el club más exclusivo de Bogotá, así como con el propio Uribe en una reunión en su residencia en la Casa de Nariño, según los participantes.
 
Algunos de ellos encontraron en ese mensaje un respaldo a sus propias ideas.
 
"Debemos ocuparnos del problema tributario ahora" porque es "anacrónico y está lleno de excenciones", según Mauricio Cárdenas, director de Fedesarrollo, un instituto independiente, quien también coincidió con Rato en que es necesario reducir la deuda porque ésta "es una vulnerabilidad".
 
"Estamos en una época de vacas gordas y Rato dijo que es un entorno que no va a estar para siempre", añadió.
 
Colombia, como el resto de América Latina, se beneficia actualmente de los precios elevados de productos que exporta, como el petróleo y el café, gracias el alza súbita de la demanda en Asia, que ha permitido exportar a niveles nunca vistos.
 
Además, los bajos tipos de interés en Estados Unidos y la revaluación de su moneda han abaratado la deuda en dólares.
 
El Fondo quiere que Colombia y el resto de países latinoamericanos no se duerman en los laureles y ahorren más para prevenir la repetición de los ciclos de crecimiento explosivo seguidos de crisis drásticas que han caracterizado a la región en el pasado.
 
No obstante, al Gobierno de Uribe le interesa por motivos políticos aumentar el gasto y ha pedido al Fondo que el nuevo acuerdo crediticio que ambas partes negocian eleve la meta del déficit presupuestario al 2,5 por ciento para este año.
 
Según fuentes del Ministerio de Hacienda que no quisieron ser identificadas, esta solicitud no será un impedimento para el anuncio del pacto, que se prevé que se produzca mañana, jueves.
 
Sin embargo, el visto bueno del FMI no será bien recibido por algunos.
 
"Es inconcebible que el Fondo permita que se aumente el déficit cuando todos sabemos que es para la reelección", denunció Cecilia López, ex ministra de agricultura del Partido Liberal y directora de Agenda Colombia, un organismo independiente.
 
Un asunto que sí enfrenta al FMI y al Gobierno en la negociación del acuerdo es el régimen de las subvenciones estatales, que el organismo quiere que se eliminen, según las fuentes de Hacienda.
 
En las reuniones de hoy Rato "atacó los subsidios a los ricos", según López. La ex ministra citó, por ejemplo, las ayudas a los grandes productores agrícolas y a los empresarios que realizan una nueva contratación, cuando, a su juicio, "pueden despedir a dos por la puerta de atrás".
 
López, sin embargo, criticó la insistencia del Fondo en reducir la deuda, en lugar de promover el crecimiento, "que es la fórmula fundamental para reducir la deuda".
 
Un balance más negativo de la reunión con Rato hizo el director del Partido Liberal, Juan Fernando Cristo, quien concluyó que "el FMI tiene unas preocupaciones y el pueblo colombiano tiene otras".
 
Cristo dijo que considera en este momento "muy difícil llevar adelante la reforma tributaria" que desea el Fondo para aumentar la recaudación y hacer más equitativa la carga fiscal.