Decisión se dio el pasado jueves en Quito, según una publicación que aparece hoy en la prensa escrita.

El gerente de la Agencia de Garantía de Depósitos (AGD), Carlos Arboleda, resolvió el pasado jueves la transferencia de bienes de las empresas Eléctrica del Ecuador (Emelec) y Electroecuador, de propiedad de Fernando Aspiazu –según conocimiento público– al fideicomiso AGD.

La resolución considera la Orden General de Incautación del 8 de marzo del 2002, donde se establece la incautación de los bienes de accionistas, entre ellos Aspiazu, del cerrado Banco del Progreso y Banco del Progreso Limited.

Publicidad

Los bienes de las eléctricas se mantendrán en el fideicomiso AGD como garantía, por  90 días, hasta que se compruebe la  real propiedad que tendría Aspiazu sobre estos.

Sin embargo, integrantes del comité fiduciario –actuales administradores de los activos de ambas empresas– y representantes del sector productivo, desconocían hasta ayer la resolución de la AGD, por lo que se reunirán para discutirla en el transcurso del día.

La Agencia de Garantía de Depósitos (AGD) resolvió el  jueves pasado que los bienes de las empresas Eléctrica del Ecuador (Emelec) y de Electroecuador -pertenecientes al ex banquero Fernando Aspiazu, según denuncias de varios ciudadanos-, pasarán al Fideicomiso AGD, durante 90 días.

Publicidad

En  ese periodo, la AGD verificará la propiedad de las dos empresas.

La medida, autorizada por el gerente general de la AGD, Carlos Arboleda, y publicada  hoy en la prensa escrita a través de un comunicado de la entidad, hace extensiva la orden general de incautación expedida el 8 de marzo del 2002, contra los bienes de los ex accionistas del cerrado Banco del Progreso, entre ellos Fernando Aspiazu, quien se encuentra preso en Guayaquil.

Publicidad

La AGD informa que la acción obedece a la declaración escrita y notariada de centenares de ciudadanos, incluidos representantes del comité de veteranos y jubilados de Emelec, acerca de la pertenencia de Aspiazu sobre los bienes de las eléctricas.

Los activos de las empresas constan en un fideicomiso local para la generación y distribución de energía y pago a los depositantes del Banco del Progreso desde el 21 de julio del 2003, razón por la cual el anuncio sorprendió a representantes del sector productivo de Guayaquil que integran la fiducia.

Dimitri Durán, director del comité fiduciario, declaró ayer su desconocimiento ante la nueva resolución de la AGD y aclaró que “dicha medida no tiene sentido puesto que el fideicomiso local es una figura legal autónoma, privada e inembargable”.

La resolución de la AGD será discutida hoy por representantes de los sectores productivos y sociales integrantes del comité fiduciario en las instalaciones de Fodevasa -actual administradora de la fiducia-, en el momento que se conozca, dijo Durán.

Publicidad

Alberto Dassum, presidente de la Cámara de Industrias de Guayaquil, quien también desconocía la nueva resolución, comentó que el anuncio carece de propósitos pues la AGD transfirió la administración de las dos empresas a la Corporación para la Administración Temporal Eléctrica de Guayaquil (Categ).

A través de un fideicomiso, la ley  permite que un tercero administre un bien que esté en condición de garantía.

ANTECEDENTES

DISPOSICIÓN
El Ministerio Fiscal del Estado, mediante oficio del 22 de agosto del 2001, dispuso a la AGD la incautación y la prohibición de traspaso a terceras personas, de los bienes que son propiedad de los accionistas de instituciones financieras –según público conocimiento– que hayan incurrido en delitos bancarios.

Este fue el antecedente para que la AGD dispusiera la incautación de bienes del ex banquero Fernando Aspiazu, mediante una Orden General de Incautación, del 8 de marzo del 2002.

BIENES DE PÚBLICO CONOCIMIENTO
Los bienes de propiedad de Fernando Aspiazu, quien fue propietario del Banco del Progreso, y que eran de conocimiento público, según la orden de marzo del 2002, son:  acciones en Almacepro S.A., Mervalores S.A., Invidepro S.A., Canarias S.A., Suminasa y los bienes muebles, cuadros y esculturas del edificio matriz del cerrado Banco del Progreso ubicado en Guayaquil.