La Marina sancionó a un grupo de doce comerciantes de comida de este cantón por haber irrespetado el plan Temporada 2005, que en uno de sus puntos establece que solo se atraerá a los turistas hacia sus comedores desde el perímetro de su local.

Los vendedores, sancionados con dos semanas de clausura de sus establecimientos, son de las asociaciones El Sol brilla para todos y 2 de Mayo.

En la petición de sanción, incluso estuvieron de acuerdo otros  comerciantes del cantón, quienes recordaron el compromiso de que se respeten las áreas de trabajo de cada negocio.

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Algunos sancionados como Ricardo Suárez, María Bohórquez e Isabel García reconocieron que faltaron al reglamento, pero argumentaron que lo hicieron por la competencia desleal de un grupo de vendedores informales que vendieron comida, en tarrina, por  un dólar. “Esa comida era antihigiénica y no hubo control para ellos que no pagan permisos como nosotros que sí cancelamos hasta 200 dólares por autorización”, señaló Bohórquez.