El general disidente venezolano Felipe Rodríguez, capturado el sábado por seis delitos, entre ellos la colocación de  bombas a las embajadas de Colombia y España en Caracas en febrero del 2003,  recibió de una jueza una orden privativa de libertad.

Rodríguez fue imputado por los delitos de agavillamiento, posesión de armas  de guerra, rebelión, conspiración, instigación a la rebelión e incendio y uso  de artefactos explosivos.