Los enfrentamientos y reclamos políticos siguieron influyendo en la confianza empresarial; sin embargo, en enero hubo una ligera recuperación del índice que mensualmente mide la firma Deloitte.
En diciembre pasado, los empresarios se mostraron menos optimistas. El Índice de Confianza Empresarial cayó de 120,9 a 104,6 puntos; en enero este indicador se incrementó a 109,1 puntos (sobre 250).
Esta ligera mejora, según Deloitte, se debe a “la buena acogida en los mercados financieros para el canje” de deuda y la reducción del riesgo país.
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Pese a ello, el 56% de los consultados no prevé mejoras en la inflación y el 80% en las tasas de interés.