El gobierno brasileño lanzó este miércoles un estudio sobre el uso de células madres para tratar enfermedades cardíacas, que calificó como el más grande del mundo en su tipo.
 
El ministro de Salud, Humberto Costa, declaró iniciado el estudio con 1.200 pacientes en el Instituto Nacional de Cardiología en Laranjeiras.
 
A cada paciente se le tomarán células madres de la médula ósea para colocarlas en el corazón, donde se espera que generen tejido nuevo. Los estudios iniciales han dado resultados impresionantes, según los científicos.
 
Si el estudio da buenos resultados, el tratamiento será gratuito a través del sistema nacional de salud.
 
Las células madres adultas, que se encuentran en la médula, se pueden usar para recuperar tejido cardíaco dañado, pero son menos flexibles que las células madres embrionarias, que pueden convertirse en cualquier tipo de células.
 
La suerte de las investigaciones con células madres embrionarias están en discusión con el Congreso.