Los adolescentes reaccionan como sus abuelos, es decir, mucho más lentamente, cuando hablan por sus teléfonos celulares mientras conducen, según un nuevo estudio que alerta sobre la peligrosidad de los jóvenes al volante.
 
Cuando los conductores de entre 18 y 25 años hablan por sus móviles conducen como personas de entre 65 y 74 años, lo que supone que reaccionen con más lentitud e incrementen el riesgo de sufrir accidentes, según un estudio de la Universidad de Utah.
 
"Si colocas a un conductor de 20 años con un teléfono móvil, sus tiempos de reacción son los mismos que los de un conductor de 70 años", dijo David Strayer, profesor de psicología de esta universidad y principal autor del estudio, publicado en la revista científica "Human Factors".
 
Este "envejecimiento instantáneo" se produce también con dispositivos "manos libres", ya que cualquier actividad que requiera que el conductor sea parte activa de una conversación influye en sus habilidades, según dijo Strayer.
 
Este investigador ya mostró en un estudio anterior que los conductores que hablan por sus celulares mientras conducen tienen menos capacidad que los que han bebido (con un nivel de 0,08 de alcohol en la sangre).
 
El estudio encontró que los conductores que hablan en el móvil, aunque sea un "manos libres", son como media un 18 por ciento más lentos a la hora de frenar, y les lleva un 17 por ciento más de tiempo recuperar la velocidad que tenían cuando frenaron.
 
Las investigaciones cuestionan la efectividad de leyes como las de Nueva York o Nueva Jersey, que solamente prohíben los teléfonos que no incorporan "manos libres".
 
Curiosamente, el estudio también mostró que la conducción de los ancianos no se ve afectada por el uso del móvil, posiblemente porque la tendencia a asumir menos riesgos, habitual entre las personas de más edad, ayuda a evitar peligros adicionales.
 
Las distracciones a causa de teléfonos móviles causan 2.600 muertes al año en Estados Unidos, según la sociedad "Human Factors and Ergonomics", que publicó el estudio.