Una persona murió y otra resultó gravemente herida luego de que un camión tanquero de la toma de agua Puerto Azul chocara contra una furgoneta de transporte público, empujándola hasta donde varias personas esperaban buses.

El hecho ocurrió a las 07h00 de ayer en el kilómetro 23 de la vía Perimetral, cuando Rosa Castro Santillán, de 35 años de edad, y Ángel Antonio Lavalle Cortez, de 17, se dirigían a sus respectivos trabajos.

Los testigos aseguraron que, debido a la llovizna que cayó ayer en el sector, el chofer del camión perdió el control del automotor e impactó primero contra una camioneta y luego golpeó a la furgoneta que se hallaba estacionada a un costado de la vía embarcando pasajeros para trasladarlos hasta la ciudadela Los Ceibos.

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“Rosa fue la más golpeada por lo que la llevamos al hospital Luis Vernaza donde murió al llegar”, contó Pilar Castro, hermana de la fallecida, quien era casada con William Pazmiño y tenía dos hijos menores de edad. Lavalle se encuentra en el mismo centro hospitalario con pronóstico reservado.

Los conductores de los tres vehículos huyeron, lo que causó la ira de los moradores del sector, que intentaron retener el tanquero hasta que su propietario se identifique y corra con los gastos del funeral de Castro.

Miembros de la Comisión de Tránsito del Guayas (CTG), de la Policía Nacional y del plan Más Seguridad acudieron al lugar para trasladar a la camioneta y al furgón hasta el canchón de la CTG y para evitar que la multitud se apodere del camión, que iba a ser encadenado a un poste de la carretera.

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En ese momento apareció una persona que preguntó por el accidente, quien fue identificado por Pilar Castro como dueño del tanquero, lo que enfureció aún más a los vecinos. Para proteger la integridad del hombre, quien no dio su nombre, los gendarmes lo embarcaron en un patrullero.

“Yo solo vi el camión, que es de un amigo mío, y me acerqué a preguntar. ¿Creen que si fuera el dueño del carro estuviera aquí?”, expresó el hombre, quien luego se retiró del sitio en un bus de transporte urbano de la línea 16.

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Con autorización de los oficiales de la CTG, el tanquero fue llevado por los vecinos a la cooperativa Paraíso de la Flor, hasta que aparezca el dueño.