La declaración del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, de que solo será en la reunión del jueves con su colega Álvaro Uribe cuando se resolverá la crisis diplomática bilateral, causó desconcierto ayer en Colombia.

La advertencia de Chávez fue hecha el domingo, 48 horas después de que Bogotá declarara resuelto el diferendo, anunciando que revisaría los hechos relacionados con la captura en diciembre del jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Rodrigo Granda, en Caracas, que detonó la crisis.

Chávez indicó haber recibido el comunicado de  Bogotá como una “rectificación”.
Ayer, las autoridades fronterizas de Venezuela seguían restringiendo el paso de colombianos y controlaban vehículos y combustibles.

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Confrontación con EE.UU.
El domingo, Chávez reiteró sus ataques verbales contra EE.UU. en el Foro Social Mundial en Porto Alegre, Brasil, donde afirmó que con sus homólogos brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva; argentino, Néstor Kirchner; y el electo de Uruguay, Tabaré Vázquez, abrirá “el camino hacia la integración latinoamericana”, y elogió a los mandatarios de Cuba, España y Rusia.

Además renovó sus críticas al presidente de EE.UU., George W. Bush, al afirmar que “el imperio norteamericano no es  invencible” y que Venezuela defenderá su revolución ante todo ataque externo, razón por la que fortalece su aparato militar, incluso para enfrentar una agresión estadounidense, para lo cual junto con Cuba “nos defenderemos mutuamente”.

Sin embargo, hasta ayer no había una reacción oficial venezolana sobre una fotografía, que supuestamente mostraría la amistad de Chávez con las FARC, publicada en el diario The Miami Herald.

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La foto muestra al mandatario venezolano en uniforme verde olivo, en el puente de Boyacá, junto con dirigentes de las FARC, jurando reivindicar el sueño libertador de Simón Bolívar.