El quinto Foro Social Mundial (FSM) concluyó ayer en Porto Alegre, Brasil, comprometiendo a más de 6.000 organizaciones a una lucha común focalizada en el combate al hambre, en favor de la reforma de las Naciones Unidas y opuesta al Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA) y la ocupación de Iraq.

El año próximo el encuentro posiblemente será en Venezuela, aunque hasta  abril el comité internacional del FSM no anunciará oficialmente el lugar. También podría anunciar la descentralización del encuentro y su celebración simultánea en tres continentes.

Los seis días de debates en los que participaron 155.000 personas, fueron clausurados con un “muro de propuestas” elaborado con 200  iniciativas del foro.