El ruso Marat Safin asegura que no es supersticioso pero cree en el destino. El australiano Lleyton Hewitt vive un sueño forjado gota a gota con el sudor de su esfuerzo.

Uno solo de los dos llegará hoy a la cumbre. Safin, cuarto cabeza de serie, enfrenta al número 3, Hewitt, en la primera final de individuales en el Abierto australiano de tenis.

Safin ya fue finalista en dos ediciones de este torneo (2001 y 2004) en los últimos tres años, pero las perdió. “Creo en el destino; creo que todo lo que me ocurrió tenía que ocurrir..., por eso sería muy tonto desperdiciar esta oportunidad (de ganar el torneo)”, dijo el tenista ruso.

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Mientras Hewitt, de 25 años, espera triunfar para darle a su país el título de este Grand Slam. El último australiano en ganar el torneo de individuales masculino fue Mark Edmondson, en 1976.