Carlos Vera quiere ver a Jorge Zambrano, alcalde de Manta, plantando carpa en la playa para pasar la noche. No una, sino “tres o cuatro”. La idea se le ocurrió a Gabriela Baer, como una manera de restablecer la confianza entre la población atemorizada por el enjambre sísmico famoso.

A Vera le pareció de lujo, lo más apropiado para un líder verdadero en situación de paranoia colectiva: el playazo nocturno. Y como lo suyo es poner al entrevistado contra las cuerdas (contra las que sean), presionó por una respuesta.
C. VERA.-  ¿Lo va a hacer o no lo va hacer?
J. ZAMBRANO.-  Lo puedo hacer.
C.V.- Sí o no.
J.Z.- Voy a comprar una carpa.
C.V.- Eso, OK.

Ya podemos imaginar al alcalde  en tanga, bregando a medianoche con el toldo y con los fierros bajo el embate del viento. Y a Carlos Vera, quien confirmó su presencia en la apertura de la temporada playera (aunque es más posible que él llegue a un hotel) registrándolo todo con su videograbadora portátil, para transmitirnos la buena nueva a primera hora del lunes: el Alcalde pasó la noche en la playa.  

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Eso sí que nos llenaría de tranquilidad, restituiría nuestra confianza en los elementos y nos libraría del temor a los tsunamis que nos invade desde aquel domingo 2 de enero, cuando, a distinta hora pero en el mismo canal, se nos hizo creer en su inminencia.

Un gesto tan sencillo de parte de Zambrano sería el mejor antídoto contra las fiebres producidas por el informe Nishenko.  Y un logro periodístico importante para ‘Contacto Directo’. Porque ahora resulta que, cuando Ecuavisa la embarra, es el Alcalde de Manta quien tiene que andar haciendo ridículas demostraciones… A petición de Ecuavisa.