La Península recibió a más de 5.000 turistas el fin de semana

Más de cinco mil visitantes durante el pasado fin de semana recibió la península de Santa Elena, pese al aguaje que se anunció.  

Hasta cerca del mediodía de ayer, turistas procedentes de diversos lugares del país, en especial de Guayaquil, llegaban hasta las dos playas de Salinas: San Lorenzo y Chipipe. En esta última se ubicó la mayoría de las personas.

Las boyas que marcan el límite para los bañistas fueron cambiadas por la Capitanía del Puerto.

Aunque días antes Fernando Boloña, vocero del Municipio de Salinas, expresó que esta entidad no permitirá la venta de bebidas alcohólicas en la playa, para evitar desmanes,  en el sector conocido como Las Palmeras se ubicaron dos carpas de cinco metros aproximadamente, de las dos principales marcas de cerveza que se expenden en el país,  además de otras más pequeñas que las comercializaban, al igual que vendedores ambulantes.

Reportes
Según la  central de radio  de la Comisión de Tránsito del Guayas, el pasado fin de semana no se reportaron accidentes y hasta pasado el mediodía de ayer no tenían cifras de los carros que se desplazaron a los balnearios.
 
En el sector de la primera de las torres salvavidas, frente al edificio Torremar, hubo basura  y desperdicios, como botellas desechables y fundas.

Los salvavidas se ubicaron en las siguientes torres,  unos 300 metros más adelante. El presidente de la Asociación de Salvavidas, Marco Lara, voceaba con la ayuda de un megáfono a quienes estaban en la playa, las precauciones necesarias para evitar accidentes. 

Lara advertía a quienes jugaban fútbol, practicarlo  lejos  de la orilla;  evitar las mascotas en la playa, usar chalecos salvavidas en las embarcaciones y a los adultos, cuidar a los niños. 

Indicó también que hasta el momento no se habían registrado accidentes en Salinas. 

Hasta ahora son cincuenta  los salvavidas que vigilan las playas en la Ruta del Sol, pero en Salinas únicamente están destinados doce, seis para San Lorenzo y seis para Chipipe, lo que resulta muy poco para la cantidad de turistas que visitan este balneario. Lara dijo que esto se debe al poco auspicio que reciben de la empresa privada. 

La Capitanía del Puerto donó a los salvavidas un terreno ubicado en la parte posterior de sus oficinas. La Asociación de Salvavidas busca apoyo de otras entidades para conseguir vehículos y mobiliario.