Policía reparte mil uniformados en 120 puntos críticos de Guayaquil

La comandancia de Policía del Guayas distribuyó ayer 500 gendarmes para vigilar el centro de Guayaquil, 250 para el norte y 250 para el sur.

Guayaquil cuenta desde ayer con 1.036 policías, de los cuales aproximadamente 500 vigilarán desde la próxima semana el centro de la ciudad, 250 el norte y 250 el sur, dentro del nuevo plan de seguridad que ha dividido la urbe en 120 puntos críticos.

Durante una ceremonia en el cuartel Modelo, el comandante general de Policía, Jorge Poveda, dijo ayer que los gendarmes contarán con 400 escopetas Mossberg, 2.000 carabinas Rugger, 20 subametralladoras de 9 milímetros y 60 mil municiones para el control de la delincuencia.

Poveda señaló que con la llegada de estos policías, Guayas cuenta con 6.600 uniformados para su seguridad, y que el próximo marzo se graduarán 4.100 policías, de los cuales 400 serán enviados al área rural de la provincia.

Anunció la compra de 12.550 pistolas y de 400 motocicletas, que aún se encuentran en licitación, de las cuales serán 2.500 y 200, respectivamente, para Guayaquil.

No obstante, la Fiscalía adjunta a la Policía Judicial del Guayas (PJ-G) registró hasta ayer las denuncias de perjudicados en seis asaltos express (incluye la retención momentánea de la víctima) entre el 19 y 20 de enero pasado. Con estos casos suman 19 los atracos del mismo tipo, en enero.

El comandante general de Policía, Jorge Poveda, presentó ayer oficialmente a los 1.036 efectivos que se sumarán a la seguridad de Guayaquil. De ellos, según el jefe policial del Guayas, coronel Luis Cadena, 500 resguardarán desde esta semana el centro de la ciudad, 250 el norte y 250 el sur.

Poveda afirmó que “la Policía no le miente al pueblo de Guayaquil”, al referirse a la entrega de 1.000 chalecos antibalas, 2.000 carabinas Rugger, 400 escopetas Mossberg y 20 subametralladoras de 9 milímetros.

El máximo jefe policial no precisó el día de inicio de los operativos, ya que según sostuvo los nuevos gendarmes deben acomodarse y aclimatarse para conocer la ciudad que tendrán que resguardar.

Durante su intervención, Poveda dispuso que los gendarmes se numeraran uno por uno, mostró uno de los chalecos antibalas y rastrilló una de las armas que dio a la comandancia de Policía del Guayas, para demostrar que se encuentran en óptimas condiciones.

El director nacional de Logística de la Policía, general Wilmon Padilla, dijo el miércoles pasado que las carabinas Rugger tenían 30 años en la institución y que las escopetas Mossberg eran de las bodegas de varios cuarteles.

Poveda resaltó que los policías, provenientes de diferentes unidades del país, son elementos con experiencia y capacitados para realizar operativos contra la delincuencia en Guayaquil.

El comandante general anunció, además, la compra de 12.550 pistolas y 400 motocicletas, de las cuales 2.500 y 200 respectivamente, serán destinadas para la ciudad.

Asimismo, el oficial recordó a los policías fallecidos durante el cumplimiento de su deber, y dio a conocer su desacuerdo en “la politización de la seguridad en la ciudad”. “Los policías queremos que exista paz y seguridad en Guayaquil, es por eso que vamos a trabajar todos”, puntualizó.

El general Poveda se comprometió a reforzar el contingente de policías asignados a los cantones de la provincia del Guayas luego de la graduación de 4.100 aspirantes en marzo próximo.