El papa Juan Pablo II invitó ayer  a promover la integración de todos los inmigrantes e instó a fomentar el diálogo entre los pueblos para permitir la comprensión entre diversas culturas.

El Pontífice hizo estas manifestaciones ante miles de fieles congregados en la plaza San Pedro  para el rezo dominical del Ángelus, que coincidió con la Jornada Mundial de los Emigrantes y Refugiados que celebra la Iglesia.

El Papa subrayó la importancia de la integración entre los pueblos, “que requiere un justo equilibrio entre la afirmación de la identidad propia y el reconocimiento de la de los demás”, señaló.

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Tras enviar un saludo a todos los emigrantes, mostró su deseo de que “a través del diálogo crezcan la simpatía y la comprensión entre las diversas culturas”.