El presidente palestino Mahmoud Abbas instó en su toma de posesión este sábado a un alto el fuego mutuo con Israel y a mantener conversaciones con el Estado judío para lograr un acuerdo de paz definitivo.
 
En una copia del discurso que pronunciaría al jurar su cargo para suceder a Yasser Arafat, dada por adelantado a los medios, condenó los recientes incidentes de violencia perpetrados por extremistas palestinos e Israel, que rompió lazos con los palestinos.
 
"Esta (violencia) no ayuda a originar la calma necesaria para permitir un proceso de paz creíble y serio. Estamos buscando un alto el fuego mutuo para poner fin a este círculo vicioso", dijo Abbas.
 
"Nuestra mano está tendida hacia el socio israelí para concretar la paz, pero esta sociedad no se concreta a través de palabras sino de hechos", agregó.
 
"La paz sólo puede conseguirse trabajando juntos para alcanzar una solución de estatus permanente que aborde todas las cuestiones pendientes, y que dé la vuelta a una nueva página basándose en dos estados vecinos".
 
Abbas fue elegido presidente con una mayoria abrumadora en las elecciones celebradas el pasado domingo, pero se enfrenta al reto de los extremistas, que han desafiado sus llamamientos para la no violencia. Arafat murió el 11 de noviembre en un hospital de París.
 
La investidura de Abbas se vio ensombrecida por la decisión de Israel de cortar sus vínculos con el nuevo líder palestino, tras un mortífero ataque de extremistas en Gaza.
 
"Es una decisión equivocada y demuestra que Israel está intentando encontrar cualquier excusa para desbaratar cualquier intento serio que lleve a relanzar el proceso de paz y lograr calma", dijo el primer ministro Ahmed Qurie.
 
"Hay partes en los bandos palestino e israelí que quieren obstruir los intentos por relanzar las iniciativas de paz y lograr la calma. Así que es erróneo aferrarse a cualquier oportunidad para justificar tomar ese camino", dijo Qurie.
 
La elección de Abbas ha reavivado las esperanzas para la paz de Oriente Medio en la era post-Arafat.
 
Sin embargo, el primer ministro israelí, Ariel Sharon, cortó los contactos después de que un grupo de extremistas mataran a seis israelíes en un ataque contra la terminal de carga de Karni, entre Israel y Gaza.
 
Comentando el ataque de Karni y la decisión de romper lazos, Shimon Peres, principal líder de la oposición política en Israel pero aliado de Sharon en el gobierno, dijo que "Nosotros perdimos vidas y esa es una cosa terrible, pero los palestinos son quienes una y otra vez pierden la oportunidad política e histórica".