Los hinchas del Boca Juniors reaccionaron ayer con indignación ante la decisión del presidente del club, Mauricio Macri, de que sus jugadores utilicen una nueva casaca, en lugar de la tradicional azul con una banda horizontal amarilla.

Macri había hecho saber que con motivo de celebrarse próximamente el centenario de Boca, sus jugadores saldrían a la cancha este viernes, para un encuentro del torneo de verano con su tradicional rival River Plate, luciendo nueva indumentaria. También es azul, pero la banda horizontal será reemplazada por una franja amarilla que la cruzará de izquierda a derecha.

La innovación fue defendida por Macri alegando que esa fue la casaca que utilizó Boca en sus primeros años de vida.

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El cambio provocó la inmediata e irónica reacción de los hinchas de River, cuya casaca de color blanco tiene también una franja que la cruza, de color rojo. “Podrán imitarnos, igualarnos jamás”, advirtió la página de Internet de River.
Algunos carteles fijados en el centro de la ciudad advertían a los bosteros (hinchas de Boca): ‘Sigan copiando al más grande’.

Ante la adversa reacción, Macri declaró a la prensa que   “no cambiaremos la camiseta, porque jugaremos con la misma del año pasado. En el año del centenario, queríamos que el hincha conociera las que usamos en toda la historia”.