Miles de argentinos, brasileños, paraguayos y uruguayos se congregaron ayer en Corrientes (Argentina) para venerar al Gauchito Gil, un bandido rural al que se le atribuyen centenares de milagros.

Los peregrinos se concentraron en las cercanías de la ciudad correntina de Mercedes para conmemorar un nuevo aniversario de la muerte de Antonio Jesús Gil, más conocido como Gauchito Gil, una suerte de Robin Hood vernáculo que le robaba a los más ricos del poblado para entregárselo a los pobres.

Los “fieles” se congregan en el santuario construido a la vera de la ruta nacional número 12, colmado de velas, cintas y banderas rojas, el color que define a este santo pagano nacido en Mercedes hacia 1847 y considerado por las autoridades del pueblo como “un gaucho matrero (tramposo) y ladrón”.

Publicidad

En el santuario, erigido supuestamente en torno a la tumba que guarda los restos del Gauchito desde finales del siglo XIX, se ven diversas ofrendas.