Delegado de una de las candidaturas de Barcelona, con el Canal del Fútbol.

El presidente de Barcelona, Leonardo Bohrer, llegó a las 13h41 minutos al Congreso Ordinario de Fútbol que se instaló ayer desde las 11h40. Además de atrasado, él no estaba acreditado “por omisión”, dijo el directivo.

Durante el lapso de dos horas, el club amarillo estuvo representado por una sola persona: Jorge García, quien incluso fue delegado por el Comité Ejecutivo de la Ecuafútbol como parte de la comisión de acreditación.

Publicidad

García representó a Barcelona “por ser condescendiente con una de las candidaturas (la de Isidro Romero), que pidió tener un delegado”, explicó luego Bohrer.

Sin embargo, según el presidente actual “el señor García se tomó atribuciones que no debía. Aquí el que resuelve y aprueba soy yo”.

Cuando el informe del Comité Ejecutivo, incluida la exposición sobre el Canal del Fútbol, se sometió a votación, García pidió la palabra y dijo: “Barcelona se arriesga. De esta forma se aclara lo que se ha venido comentando, de que el club tiene otra posición.  Barcelona está con este proyecto, y respaldamos la decisión de que el informe sea aprobado”, afirmó García.

Publicidad

Pero con la llegada de Bohrer, ambos salieron del auditorio. El presidente de la institución canaria le reprochó –intentando disimular el hecho– a García el tomarse la atribución de hablar a favor del Canal del Fútbol.

“Esta presidencia ha mantenido su decisión en contra (del Canal del Fútbol) y a última hora no va a cambiar. No estoy de acuerdo con ese proyecto. Soy presidente de Barcelona y cuando se trate de firmar el acta que lo autorizaría, no lo haré”, advirtió Bohrer.

Publicidad

Luego, él ingresó a la sala para asumir su cargo. “Como presidente de Barcelona, cuando se me permita hablar diré, que estoy en contra del Canal del Fútbol”, dijo.

“Si Barcelona tiene que dejar de jugar el campeonato nacional, a cambio de estar a favor (de la FEF), pues no jugaremos mientras yo sea el presidente. Si gana uno de los candidatos, hará lo que crea conveniente”, agregó.

Según García, él fue delegado por “el grupo de Romero y todo el equipo que lo apoya. Portavoces de él me hicieron conocer que yo debía respaldar el proyecto y el contrato que está firmado”, dijo.

“El ingeniero Bohrer estaba consciente de lo que que se iba a hablar. Pero ahora resulta que tiene otra posición”, comentó finalmente García.

Publicidad