El gobierno del presidente de Ecuador, Lucio  Gutiérrez, anunció este viernes que suprimirá 5.000 cargos de funcionarios  públicos a partir del sábado 1 de enero para utilizar esos dineros en la mejora  salarial de alrededor de 500.000 empleados que continuarán trabajando. 
 
"Este 1 de enero se inicia la eliminación de 5.000 cargos de funcionarios  públicos en alrededor de 70 instituciones del Estado ecuatoriano", dijo Ramiro  Espín, del ministerio de Economía y encargado de llevar a cabo la medida que,  según precisó, "es imperiosa". 
 
Informó que en el presupuesto para el próximo año, aforado en 7.343,47  millones de dólares, "hay un desequilibrio fiscal (déficit) de 750 millones de  dólares" que busca ser remediado al menos en parte con la supresión de los  cargos, aunque no reveló el monto exacto que se ahorrará con los despidos. 
 
Según Espín, además, el dinero que se ahorre será invertido en mejorar los  salarios de los funcionarios que continúen en los cargos, en lo que se conoce  como "homologación salarial", decretada por el Congreso a mediados del 2004. 
 
"La homologación será implantada a partir del 1 de enero del 2005 y será  mayor para aquellos trabajadores que ganen menos", dijo Espín, explicando que  hay 17 escalas de salarios para las diferentes categorías en las distintas  instituciones del Estado (ministerios, secretarías, organismos descentralizados  y otras dependencias). 
 
A comienzos de diciembre, el Parlamento destinó 60 millones de dólares del  presupuesto para cubrir la homologación de los trabajadores públicos, que en  ese entonces estaban en huelga de hambre. 
 
"El gobierno espera que el mejor recurso humano se quede en sus cargos",  sostuvo Espín, indicando que aún no está la lista de quienes quedarán sin  trabajo este año. 
 
Para el funcionario "ese es el lado duro" de la medida, pero observó que  Ecuador tiene una gran burocracia que consume gran parte del presupuesto de la  Nación. "Ya el Estado no puede más y se espera que con 5.000 funcionarios menos  mejore la eficiencia", señaló. 
 
Explicó que "a cada uno de los funcionarios que tengan que dejar sus cargos  se les indemnizará en lo legal". 
 
Espín reveló que "se les pagará 1.000 dólares por cada año de trabajo"  hasta un máximo de 30.000 dólares. 
 
De otro lado, las organizaciones que congregan a los trabajadores públicos  dijeron estar preocupadas y señalaron que conocen de la medida por las  informaciones suministradas por los ministros de Trabajo y Economía. 
 
Una empleada del ministerio de Gobierno, que pidió mantener el  anonimato, señaló que está "muy preocupada". "No sé si estoy entre los que van  a despedir", indicó. 
 
"Esto es grave y angustioso porque una que es cabeza de familia no se puede  quedar de un momento a otro sin el trabajo que le representa un ingreso para el  sustento del hogar", añadió. 
 
"Yo no se qué voy a hacer si mi nombre aparece entre los que despidan",  dijo César Andrade, un mensajero que lleva ocho años trabajando en uno de los  ministerios y que indicó que "son muchas las personas a las que se les ha  dañado el Año Nuevo pensando en que los botarán". 
 
El ministro de Economía, Mauricio Yépez, indicó que todo esta listo para  que se inicie la supresión de los 5.000 cargos. "Una partida que sea eliminada  no podrá ser rehabilitada para designar otro nuevo funcionario", advirtió  Yépez.