El jefe del principal partido chiita, Abdel Aziz Hakim, salió ileso ayer de un atentado con coche bomba contra su oficina en Bagdad que causó 13 muertos, mientras que el partido sunita más importante del país anunció que boicoteará los comicios del 30 de enero.

Igual anuncio hizo el jefe de Al Qaeda, Usama Ben Laden, quien reconoció a Abu  al Zarqaui como el jefe de la red terrorista en Iraq y llamó a los iraquíes a  boicotear las elecciones del 30 de enero, en un mensaje de audio que le  atribuyó ayer el canal de televisión Al Jazeera.